
PRIMICIA. – Como si se tratara de una escena de película mal actuada, un sujeto sindicado de presuntamente haber cometido el delito de violencia familiar decidió que la mejor forma de evadir a las autoridades era esconderse nada menos que en el cementerio general de Cerro de Pasco.
El individuo, que venía siendo perseguido, ingresó por una pared derrumbada del camposanto, quizá creyendo que entre tumbas y cruces lograría hacerse el «muertito» para escapar.
Pero su acto no pasó desapercibido, y fue personal de serenazgo de la Municipalidad Distrital de Yanacancha quien lo encontró y retiró del lugar tras reporte del personal de cuidado del Cementerio General de Cerro de Pasco.
El hecho fue confirmado por el gerente general de la Beneficencia Pública de Pasco, Medardo Zenayuca Lanasca, tras el reporte emitido por la administradora del cementerio.
Una vez más, la violencia familiar deja claro que algunos agresores, además de cobardes, intentan burlarse de la justicia de formas tan absurdas como indignantes.